COMPLETAS Y PLENAS

Porque en Él habita corporalmente toda la plenitud de la Divinidad. Y estáis completos en Él, el Cual es la Cabeza de todo principado y potestad.

Colosenses 2: 9,10

Todas queremos sentirnos completas. Muchas personas creen que a través de un “medio naranja” (entiéndase cónyuge), un cuerpo escultural, una carrera, riquezas u otra cosa llegarán a sentirse plenas. El mundo nos ha vendido muchas mentiras a las mujeres. Desde el día en que Eva recibió la “visita” de la serpiente las mujeres hemos vivido bajo el ataque, a veces frontal y a veces sutil, del enemigo. Nos ha querido hacer creer que valemos poco, que somos inferiores y que no tenemos propósito. A veces aún dentro de la misma iglesia encontramos que las mentiras acerca de la mujer la aplastan. Algunos afirman que la mujer no tiene el derecho de hablar; que sin la autoridad de un hombre sobre ella, no podrá servir en el Reino; y que la pérdida de la personalidad es el precio que se paga por ser “bíblicamente sumisa”.

La Biblia en su totalidad es el manual de vida del ser humano. De tapa en tapa, nos enseña cómo vivir; y se aplica a hombres y mujeres por igual. Muy pocos versículos han sido escritos directamente al varón u a la mujer. Esos versículos nos ayudan a comprender mejor al sexo opuesto y la voluntad de Dios para ellos y nosotras. No se debe tomar ciertos versículos y aplicarlos fuera de contexto.

La voluntad de Dios para toda persona es esencialmente la misma: que le conozcamos a Él, que vivamos cerca de Él, que alcancemos la plenitud de Su propósito para nuestra vida y que pasemos la eternidad con Él. Todo esto se recibe a través de Jesucristo. ¡Esta es la Verdad que debemos creer! En toda la Biblia no encuentro ni un versículo que oprime o limite. ¡De lo contario! A través de las Escrituras Dios nos dice, “No temas que estoy contigo; todo lo puedes porque Yo te fortalezco; eres más que vencedor; olvida el pasado, extiéndete hacia delante y prosiga a la meta”. A Dios le interesa que seas plena y feliz porque te ama. ¡Su voluntad es que llegues al final de la carrera en victoria!

Mujer, es Cristo quien te perfecciona. No creas que debas estar en una relación con un hombre para ser completa. No aceptes las mentiras de los medios cuando enseñan que solo un cierto tipo de figura es bella. No dudes que el mensaje que Dios te da debe ser compartido. En Cristo podemos amar plenamente, tener belleza que impacta y alcanzar lo que Dios ha trazado para nosotras. No te afanes con ninguna cosa. No creas que no puedes. Tu abundancia se encuentra en Cristo. En Él encontrarás la plenitud y Su voluntad perfecta para tu vida.

Padre Amado, gracias por Tu voluntad perfecta para mi vida. En Ti encuentro la plenitud. Decido no afanarme por nada de este mundo. Cada día te busco a Ti y es en Ti que soy completa. Lléname más de Ti. Te amo. 

Amén