miércoles, 4 de enero de 2017

PODEROSAS

Seamos sinceras. Cuando todo va bien y la gente se porta correctamente, no tenemos problemas para medir lo que decimos. Pero cuando nada sale como queriamos,  las cosas se rompen,  los hijos se rebelan,  el esposo es indiferente,  hace demasiado calor y estamos por menstruar es otra la historia. Ustedes saben exactamente de qué estoy hablando.

Hay momentos que creo que todas pasamos alguna vez,  en que sentimos que estamos a punto de perder el control. Las cargas son demasiadas y nuestro aguante no alcanza. Son instantes de mucho peligro porque en un descuido decimos cosas que hieren y destruyen.

También,  hay que ser sinceras,  hay personas que tienen problemas en esta área; y esto generalmente es fruto de un corazon lastimado. Constantemente atacan,  critican y verbosean,  dañando a la gente que está cerca de ellos.

Cuando Dios creó al universo,  lo hizo hablando. Él dijo y,  una a una,  cada cosa vino a existencia. De la misma manera,  lo que nosotras decimos,  forma nuestro mundo.

No estoy diciendo que la perfección es la medida. Sí estoy diciendo que hay lecciones que necesitamos aprender de manera urgente,  porque tenemos en nuestra boca el poder de levantar o destruir. Nuestras palabras son poderosas.  "La muerte y la vida están en poder de la lengua, Y el que la ama comerá de sus frutos." Proverbios 18:21

Nunca es tarde para cambiar. Si has hecho daño con tus palabras,  pida perdón y busque la paz. Empiece hoy mismo el proceso de cambio,  y comience a formar con tus palabras el entorno en donde quisieras vivir.

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Nota: solo los miembros de este blog pueden publicar comentarios.