jueves, 13 de octubre de 2016

SAL DEL LAGAR

Muchos de nuestros problemas y temores nacen de nuestro pobre conocimiento de quiénes somos. Nunca me cansaré de insistir que cada una de nosotras al descubrir en intimidad a nuestro Padre,  descubriremos a nosotras mismas.

Es que viviremos con dudas y confusiones si no nos plantamos cada día en la Verdad. Tenemos un enemigo astuto quien se empeña en tapar nuestros ojos para que no veamos que somos más que vencedores.

Alguien quien luchó con esto fue Gedeón. Su pueblo fue oprimido por los madianitas durante años. Israel no podía prosperar porque cada cosecha era saqueada por ellos. Los israelitas tuvieron tanto miedo que se hicieron cuevas,  cavernas y lugares fortificadas. Vivían en temor. Y Gedeón no era la excepción.

Un día estaba separando el trigo (un trabajo que se debe hacer al aire libre) en un lagar (un lugar cerrado) cuando le aparece un ángel quien la llama "hombre esforzado y valiente".  Casi suena a sarcasmo,  considerando que Gedeón estaba en el lagar por temor a los madianitas.

Tu condición,  tu pasado,  tus debilidades,  tus fracasos,  tus temores,  tus fortalezas,  tus talentos u aparente falta de talento,  tu carácter,  tu personalidad,  ni ninguna otra cosa impide que Dios haga lo que Él quiera en ti,  ni que Él te vea como Él te ha diseñado.

Muchas personas no han comenzado a demostrar su verdadera potencial. Muchos no se han dado cuenta todavía de que tienen una potencial no explotada aún. ¡Pero el Señor sí!  Dios no te ve según tus circunstancias sino conforme al propósito que Él diseñó para ti. Necesitamos descubrir en Él esa visión y activarla. Es urgente salir del lagar para entrar a la plenitud de todo lo que Dios tiene preparado. 

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Nota: solo los miembros de este blog pueden publicar comentarios.